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La manera de evitar el ahogado es predecir los movimientos siguientes y ver la partida en la mente. Esa es la forma mucho más eficaz de intentar eludir el ahogado. Cuándo hay un ahogado, la partida automáticamente se finaliza y se hace con un resultado de tablas, es decir que se queda en \’empate\’.
A veces se logra el dominio del tablero de una forma contundente. No obstante si nos dejamos llevar por esperar humillar a nuestro contrincante en vez de buscar el jaque mate lo más rápido viable tenemos la posibilidad de arrinconar al rey dejándolo en una situación en la que no va a tener opciones para moverse. De esta manera nuestro esfuerzo y superioridad se puede disminuye a un empate. En ajedrez la situación del ahogado se genera no se tienen jugadas legales para realizar y el rey no está en jaque.
El Ajedrez En La Escuela
Si las negras llegan a perder dicho peón en lugar de nada, perderán fácilmente la partida. Mientras que exista el peón g6, las blancas no podrán quebrar la defensa negra.
Radica en que el jugador rival no pueda mover ninguna pieza sin recibir jaque, podríamos decir que es como un jaque mate sin el jaque. Los finales de ajedrez tienden a ser lo mucho más entretenido de jugar, el juego empieza a ser mucho más belicoso y todo fluye más rápido. Pero hay que entender que no es tan simple hacer un Jaque Mate más allá de tener una enorme ventaja ya que existe el ahogado. Si la partida es tablas según establece el reglamento un jugador puede reclamar tablas al árbitro, mientras que le toque jugar.
Temas De Estudio
Un jugador sólo puede prestar tablas después de haber hecho una jugada sobre el tablero y antes de apretar el reloj. No obstante, una oferta hecha en cualquier otro momento de la partida va a ser válida, pero habrá que valorar si en ese instante se está distrayendo al otro jugador.
La repetición incluye también cuando se dieron 2 repeticiones y se dará la tercera, bien sea por el hecho de que el jugador al que le teca monver afirma que la hará bien pues sea la única jugada legal viable. En ciertas ocasiones la situación del ahogado puede jugar a nuestro favor. Frecuentemente la diferencia de piezas entre usted y las de su oponente le afirmarán que indudablemente tarde o temprano perderá. Pero hallar un empate mediante la situación del ahogado puede ser prácticamente igual que una victoria considerando sus verdaderas opciones.
Oferta Y Reclamación De Tablas
Con el agua al cuello está dirigido al aficionado medio y, por norma general, a todos esos para los que el aspecto lúdico no es inferior al competitivo en el juego de reyes. Bueno, pues es que el ahogado es un último recurso del que se puede echar mano en muchos casos para no irse con cero puntos a casa.
1…Tc6 2.Txg6 Rf5 3.Tg8 ―3…Tc3+ obligaría al rey blanco a retroceder, 4.Rf2, y las negras podrían tomar ambos peones, 4…Rxf4, ―el peón g no tiene futuro. Esta situación es un tanto mucho más compleja que la previo. Las blancas tienen un peón de sobra y parece que el peón negro de g6 se va a perder.
Las composiciones y maniobras de ahogado tienen la posibilidad de aparecer en multitud de situaciones distintas y el ser capaz de preverlas puede socorrer más de una partida y con esto conseguir un punto y no repartir medio punto. Aun en el momento en que ya se encontraba todo hecho puede manifestarse el ahogado. Las negras tienen un peón, su rey tiene mejor localización que el opuesto y sus torres intimidan jugar Tf1, que conduciría a mate. El rey blanco no posee de qué manera moverse y solo el momento puede llevar a cabo el milagro de salvar la partida para las blancas.
Con este movimiento, el rey negro gana la oposición y así nos transporta a una situación de ahogado que fuerza las tablas. Si las negras, en cambio, jugasen descuidadamente …Rd8, entonces las blancas tomarían la oposición con su rey y ganarían la partida.
